"Una Taza de Té" - Teórica 29/8 | Reflexión

   No me había dado cuenta que la teórica había sido sobre la procrastinación. Cuando vi la entrada en el blog de la Cátedra me dije a mí misma "¿Ese fue el tema?" y me puse a pensar si había llegado tarde, pero no, no llegué tarde. Tal vez fue que parte de las palabras de Gabriel se perdían y no las podía escuchar bien desde donde estaba sentada. 

 Nota mental: la próxima, sentarse más adelante.

   Ahora, procrastinación. Siempre vi mi procrastinación como un problema porque me trae problemas, como el típico dejar todo- o una gran parte - para último momento. Último momento significando la noche madrugada anterior. Eso deriva en dormir muy poco o nada. Que deriva en que me ponga de un humor rayando en lo histérico que los demás tienen que soportar. Que deriva en dormirme en el viaje (que siempre deriva en que mi pobre madre se preocupe por mi bienestar), que deriva en estar a punto de pasarme de parada o en cabecear peligrosamente en dirección a la persona al lado mío. Que deriva en estar con una adrenalina allá hasta que entrego y luego sólo quiero irme a mi casa.

   Deriva en pensar que si me hubiera puesto a trabajar antes quizás hubiera hecho un mejor trabajo. 

Ése es tal vez el que más me duele.

   Sin embargo, según mi psicóloga, encontrar los tiempos de uno, cómo manejarlos, cómo administrarlos, es un camino que se va haciendo con los años. Lo cual me anima, como también me anima también este planteo de la teórica - ¿es realmente un flagelo hacerse una taza de té? - porque, posta, creo que difícilmente lo veo así. Siempre lo siento con algo de culpa, porque debería estar haciendo otra cosa, pero quizás sí, procrastinasteando estoy experimentando, absorbiendo, aprendiendo algo. Interesandome en algo lamentablemente en un momento inoportuno... pero capaz el cerebro, o el corazón, o las tripas saben lo que hacen ¿no?

   Me gustó mucho la onda de Tony Conrad. Como esas personalidades voladas en el buen sentido, profundas, pensando un poco más allá, viendo otras cosas. Un poco como Juane también. Sin desconectarse de los recursos, de las técnicas, pero planteandolo desde otro lado, del lado de las preguntas. De qué y por qué lo hago y con qué intención. Proponer, "llenar ese vacío", "manufacturar el material", "poner a prueba el encuadre".
   Y creo que lo que más me quedó en general fue esto de hacerle pensar al ser humano en su propia finitud, que al mismo tiempo tiene la capacidad hermosa, única de pensar más allá de su tiempo, de su existencia. En cosas que trascienden, que uno puede ver comenzar pero que otros van a ver seguir o culminar. Películas que duran 50 años, una pieza que va a durar hasta el 2640, loops que son siempre iguales y nunca iguales.
En cosas que no están ahí a simple vista sino que nosotros las traemos o las cambiamos de plano, o cosas cotidianas que no por eso son menos interesantes. En el montaje, o en el análisis, como pude comprobar en los comentarios de mis compañeros en la téorica, con respecto a Lenka Clayton. Es cosa de miradas. 

¿Capricho? ¿Diseño? ¿Reciclaje? ¿Montaje?

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